lunes, 21 de marzo de 2011

La Doctrina Perdida


Título en inglés: "The Lost Doctrine - Paul Washer" (7.36 min, puesto por illbehonest)

Está con subtítulos bajo el título: "La doctrina perdida de la Regeneración" (NO ES mi traducción), aquí:
https://www.youtube.com/watch?v=DFwOz4UA79g


La evidencia de la conversión no consiste en llenar los blancos en una "Tarjeta de Decisión". Es una vida probada por el estilo de vida.
"Dios ordena a todos los hombres en todos los lugares que se arrepientan de sus pecados, y crean en el evangelio y produzcan frutos dignos de arrepentimiento."
Dices: “¡Hermano Paul, estás hablando de una salvación por obras!”
¡De ninguna manera! Estoy hablando de una doctrina olvidada por la iglesia. Tengan paciencia conmigo un segundo más, estoy cerrando mi Biblia en buena fe, y ya me voy. Ténganme paciencia otro ratito.
Si hay una doctrina perdida en iglesia de hoy, que está destruyendo la evangelización, es la doctrina de la Regeneración.
La Regeneración no es meramente una decisión humana. No vas a ser salvo, simplemente, porque decidiste salir del camino que lleva al infierno para entrar en el camino que lleva al cielo.
La Salvación es una obra sobrenatural de Dios, en donde el Poder de Dios es manifestado a tal grado que equivale, o excede, al propio Poder de Dios demostrado en la creación del universo. El universo fue creado “ex-nihilo” -"de la nada"- pero cuando Dios salva a un hombre, Él lo re-crea a partir de una porquería corrupta.
Cuando las personas verdaderamente se arrepienten, cuando verdaderamente creen, hay una obra de regeneración aconteciendo, que transforma a aquellas personas en nuevas creaturas. Y siendo nuevas creaturas con una nueva naturaleza, ¡ellas van a vivir una vida distinta!
La evidencia de la regeneración no consiste en que una vez tomaste una decisión, en una campaña evangelística. La evidencia de la regeneración es que tu vida está siendo transformada.
¿Crees que Dios transforma solamente a algunos de Sus hijos?
La doctrina que enseña que el cristiano puede vivir en un estado continuo de carnalidad es absolutamente hereje.
¿Los cristianos pecan? Sí.
¿Los cristianos pueden caer en la carnalidad? Sí.
¿Los cristianos pueden caminar en inmadurez por un tiempo? Sí.
¿Pero pueden los cristianos vivir de una forma impía y mundana todos los días de su vida? ¡Absolutamente, no!
¿Por qué? Porque la salvación es una obra sobrenatural de Dios. Y si cualquier hombre está en Cristo, es una nueva creatura/("hechura"). Y las nuevas creaturas viven de forma distinta.
Es por eso que cuando las personas me dicen que hoy hay tanto pecado adentro de la iglesia como fuera de ella, que existen tantos divorcios, pornografía, mentiras, odio, contiendas, dentro y fuera de la iglesia, digo: ¡éso es una mentira!
La iglesia del Señor Jesucristo hoy, en Estados Unidos, es hermosa. Ella está quebrantada, es confesionaria, está andando con su Dios; y cuando peca, eso quebranta su corazón y vuelve a Él.
Tu problema es que estás llamando iglesia a lo que no es la iglesia.
Si la iglesia es lo que la mayoría de las personas dice, entonces todas las promesas de la Biblia con relación al Nuevo Pacto han fallado. Porque Dios dice que en el Nuevo Pacto Él hará un pueblo nuevo, y Él será su Dios y ellos serán Su pueblo. Y la Ley de Dios será escrita en sus corazones, y ellos andarán en ella.
La evidencia de la conversión no es una “Tarjeta de decisión” en la que se llenaron los espacios en blanco. Es una vida siendo traída desde afuera/del exterior.
Un querido amigo mío llamó a un erudito muy importante en historia del cristianismo, el Dr. Dallimore.
Él le dijo: “Dr. Dallimore, tengo una pregunta: Si los Puritanos realmente nunca hicieron invitaciones para aceptar a Cristo, y cosas como las que hacemos hoy, ¿cómo sabían cuando alguien era salvo?”
Dallimore dijo: “Bueno, eso era fácil. La vida de ellos cambiaba y seguían yendo a la iglesia.”
¿Cómo sabemos que no son salvos?
No vienen a la iglesia. Sus vida no son transformadas. Pero creen que son salvos porque levantaron la mano.
Vean lo que hemos hecho... tan sólo vean... Vean.

Si tú estás aquí esta noche, y estás preocupado por tu alma, no voy a pedirte que alces tu mano y no te pediré que llenes los espacios en blanco en una tarjeta.
Pero voy a estar aquí hasta las seis de la mañana, cuando mi avión salga, para aconsejarte.
Esto es un problema, ¿no es así? Una gran presunción.
Las personas pasan al frente, firman una tarjeta, hablamos con ellos cinco minutos sobre la Salvación, los declaramos salvos. Y luego nos preguntamos por qué invertimos tanto tiempo en discipulado y, aun así, ellos no crecen.
Nosotros hicimos la gran presunción. Nosotros los hacemos pasar por un rito evangélico. Porque ellos respondieron correctamente las preguntas, los declaramos salvos y nunca nos volvemos a preocupar. Eso está mal/equivocado.
Te digo esto:
Si te arrepientes y crees en Cristo esta noche... si ya has hecho eso... Él te salvó.
Pero te digo esto:
Si hiciste una decisión por Cristo, si ves a Cristo como Señor esta noche y le profesaste Fe, Él te salvó. Pero si sales de acá y tu vida no cambia, y no empiezas a crecer, y Aquél que empezó una buena obra en ti no la completa, lo que pasó contigo esta noche no fue una conversión genuina. Porque la evidencia de una genuina conversión es una continua obra de Dios en el alma de un hombre. Esa es la forma antigua. Eso es cristianismo histórico.
¿Cuántos de ustedes... y cuántas personas conocen... es o no es cierto? Quizás tengas un hijo que hizo la profesión de fe cuando tenía 6 años, porque alguien le preguntó si quería irse al cielo y si amaba a Jesús. Por supuesto que levantaron sus manos.
Entonces, cuando llegan a los 14, 15 años y empiezan a vivir en el mundo, odiando las cosas de Dios, entonces les dices:
“Eres un cristiano, debes actuar de forma distinta.”
Te equivocas al abordarlo de esa manera. Debes dirigirte a él así:
Hiciste una profesión de fe en Cristo, pero todas las evidencias en tu vida, hasta este momento, indican que quizás tu profesión de fe en Jesucristo fue falsa y aun sigues en tu pecado. Y si mueres, te vas a ir al infierno. Busca confirmar tu vocación y elección, arrepiéntete y regresa a Cristo.”
¿Ven qué tan superficial ha llegado a ser nuestro cristianismo?
¡Ah mi querido amigo! Estas cosas no deberían ser así, pero lo son. Despierten al evangelio, al verdadero evangelio, y no a ése reducido. Es un evangelio de gracia y de poder, pues Aquél que empezó la buena obra en ti la terminará.

La evidencia de la conversión no es una “tarjeta de decisión” en la que se llenan los espacios en blanco. ¡Es una vida probada por el estilo de vida!

Adoración Cristiana

http://www.youtube.com/watch?v=k1ZBq3Cs5Vk

Título en inglés: "Paul Washer on christian worship" (9.13 minutos, cargado por "omveldelse")


Bien, el libro de Salmos está lleno de... el libro de Salmos es un libro de cantos de adoración. De modo que sí, puedes cantar. Pero aquí hay algo que pienso que sería muy importante que entendieras.
Si alguna vez escribes un libro sobre las doctrinas de Dios, te vas dar cuenta de algo muy poco común/atípico.
A lo que me refiero por las doctrinas de Dios, es a que escribas un libro sobre todo lo que la Biblia enseña acerca de los atributos de Dios.
¿Sabes qué vas a descubrir? Que más del 50% de tu libro vendrá del libro de Salmos.
Encontrarás la mayoría de los textos sobre los atributos de Dios en el libro de Salmos.
Así que, nuestro canto debería ser teológico.
Y si vas a tener un líder de adoración – si vas a hacer eso – él necesita ser un teólogo. Él necesita conocer a Dios y necesita caminar en el temor de Dios y en santidad, probablemente mucho más que aquel que predica la Palabra.
Es una cosa terrible lo que hacemos hoy en las iglesias con respecto a la adoración, porque no conocemos el temor de Dios. Un joven tiene una guitarra y canta bien.. dejémoslo liderar la adoración.

Deberíamos entender que en el libro de Levíticos Dios mató a dos líderes de adoración, porque no le adoraron en conformidad a las Escrituras. La adoración es algo peligroso.

Otra cosa que tenemos que entender es esto: la adoración, supuestamente, tiene que ser didáctica. Supuestamente, tiene que ser para enseñar. Déjenme leerles un texto. En Colosenses 3:16 dice: Que la palabra de Cristo habite en abundancia en ustedes.
Por lo que la adoración fluye de alguien que está saturado por la Palabra de Dios.
Con toda sabiduría, enseñándose, amonestándose unos a otros con salmos, himnos y canciones espirituales.

Entonces, el propósito de cantar en la iglesia es, primero y principalmente, para bendecir a Dios.

En segundo lugar, es didáctica. Para enseñar a aquellos que están cantando, para alentarles, amonestarles, y aún para ser, supongo, una herramienta de testimonio para aquellos que están escuchando que son incrédulos.

Este es un problema que tengo con mucha de la música moderna. No toda ella, pero gran parte. No siguen estos principios. Es más sobre sentimiento.
Voy a ser muy sincero con ustedes y si se enojan, tan sólo perdónenme. Soy norteamericano. Soy grosero a veces.
Mucha de la adoración en las iglesias hoy no es nada más que una celebración carnal. Es un ejercicio en emoción.
Si empiezas a sentir la presencia de Dios durante las notas altas resonantes de la canción y el ritmo ha subido, y la música es tan gloriosa – y tú sólo entonces sientes la presencia de Dios – no es la presencia de Dios la que estás sintiendo. Es emoción.
He conocido personas – algunas de las personas más santas que conozco– que se sientan, y adoran. No tienen música.
No estoy diciendo que esta es la única forma de hacerlo. No lo es, pero ellos no tienen música. Alguien dirá: “vamos a cantar el himno número 52” y empezarán a cantar.
Y otra persona dirá – después que se terminó – “¿y qué del himno 103?”. Y empezarán a adorar.

Hay algunas de las personas más piadosas que conozco en este planeta que entienden la adoración profundamente. Y sin embargo, llevaré personas a esa iglesia que son todo sobre la música y saldrán con: “Cielos, esto está muerto.Porque su idea de vida no es la verdadera presencia de Cristo. Son estas canciones maravillosas que levantan tu emoción.
Y no hay necesariamente algo malo con eso, pero sé muy cuidadoso.
Una vez estaba con un grupo y ellos dijeron:
Dios está aquí.Y la música seguía… ellos decían: “Dios está aquí.
Dije: “no, no está.”
Y ellos dijeron: “¿Cómo sabes?
Dije: “porque la mayoría de ustedes estarían muertos si Dios estuviese aquí. Porque Él es un Dios santo. Y ustedes conocen el pecado que hay en esta iglesia.”
Las personas están tan en la carne. Porque sienten algo… me detendré aquí, pero dáte cuenta de esto. Escucho a personas:
Sabes, me estaba afeitando esta mañana y Jesús se me apareció.
¿Dejaste de afeitarte?
Son tan despreocupados acerca de la presencia de Dios.
En la Biblia, cuando la presencia de Dios aparecía: ¡Ay de mí! Estoy perdido, pues soy hombre de labios inmundos y habito en medio de un pueblo de labios inmundos, y mis ojos han visto al Rey, el SEÑOR de los ejércitos.” La experiencia de Isaías (Isaías 6:5)
Dices: “Ah, ese es el Antiguo Testamento.
Juan en la isla de Patmos: Cristo aparece, cae como muerto.
No estoy diciendo que la presencia de Dios es siempre así. Pero cuando nunca es así, cuando siempre es: “bendíceme, bendíceme, bendíceme. Alegría, Alegría, Alegría. Baila, baila, baila.” Algo está terriblemente mal.


El trasfondo del "Impactante Mensaje a la Juventud "

http://www.youtube.com/watch?v=PrCvO8Elsis

Título en inglés: "The Background of the Shocking Youth Message" (porción de 11.45 minutos puesta en YouTube por "I'll Be Honest")

Entrevistador:
Uno de los sermones por el que eres más conocido es "Impactante mensaje para la juventud, o el "Mensaje de Evangelismo 2002", donde 5.000 jóvenes te escucharon predicar sobre Mateo 7. Y yo ... he escuchado un poquito del trasfondo, de la atmósfera, de los otros predicadores en aquella conferencia y lo que pasaba con la música. ¿Cuáles fueron los hechos/ sucesos/ acontecimientos que ocurrieron antes de que predicaras aquel mensaje? Y la razón por la que pregunto es para que la gente sepa que no estabas ahí sencillamente despotricando acerca de cosas que no se aplicaban a tu audiencia inmediata.

P. Washer: Correcto.

Entrevistador: quizás si pudieras solamente dar algo del trasfondo.

P. Washer:
Bien, hubo un sermón que hizo reír a mucha gente. Y hacia al final, después que las risas se calmaron, se hizo un "llamado al altar", como se le llama. Y, más o menos alrededor de... no sé, no creo que sería erróneo decir ... dos a 3.000 muchachos fueron adelante... y riendo... y toda clase de cosas. Estoy seguro de que, posiblemente, había algunos jóvenes sinceros en eso, pero igual me pareció... ¡fue chocante! Es decir, mientras los observaba, mientras los miraba, estaba pensando: “¿Dónde está la realidad de Cristo? ¿Dónde está la realidad del pecado? ¿Dónde está la realidad de la salvación, la esperanza, las cosas eternas?” ... Nada.
Era como el perro de Pavlov, ¿sabes?, en el experimento ese donde atan a un perro y lo electrocutan, y lo electrocutan y luego dejan ... quitan todas las bandas de las patas del perro. Y lo electrocutan. Y el perro sólo se queda ahí. Son entrenados para responder al estímulo.
Es la misma cosa. Es como que tantos de nuestros jóvenes han sido educados con la idea del "llamado al altar", y esto es lo que hacen; y van adelante.
No tanto culpar al que predicaba. Es sólo lo que nuestra cultura cristiana entera ha creado. Esta idea de que después del sermón, vas adelante. Pero la realidad de Cristo y la convicción no estaban ahí. Y discutiré con cualquier hombre. No estaban. Yo estuve ahí.
Además, en esa conferencia hubo un joven que había sido enormemente perseguido, echado de su hogar, todo lo demás -de familia musulmana- que se paró y compartió.
Ahí estaba la realidad de Dios claramente visible en ese joven, en todo lo que dijo. (o, también, menos literalmente: La realidad Dios era evidente en ese joven, en todo lo que dijo). Fue absolutamente asombroso.
Yo estaba (estupefacto/atónito/pasmado /anonadado), /o, mejor, pienso: 'Yo estaba a punto de desplomarme de asombro', y casi nadie en esa audiencia se conmovió. Es decir, no hubo una lágrima. No hubo un “pasa adelante.” No hubo un “recibe a Cristo.” Y lo vi bajarse de esa plataforma totalmente abatido/desalentado, como si él hubiera hecho algo mal.

Pero creo que lo que realmente me fastidió (disgustó/ enfadó) fue cuando el supuesto “grupo de adoración” -o lo que sea que fuera- salió, y todos los estudiantes corrieron hacia la parte anterior, hasta la plataforma, y estaban saltando y gritando y todo lo demás. Y, mi esposa estaba en la primera fila, y 3 ó 4 veces un joven la empujó tan fuerte mientras hacía su... lo que sea que estaban haciendo... "slam dancing" (= al parecer, "pogo" en Argentina; "slam" en Chile) o como sea que lo llamen. Casi la botó de su asiento, y finalmente ella se hartó. Lo empujó hacia el centro para protegerse. Y luego, cuando los vi alzando jóvenes y pasándolas por arriba de la gente, sabes, por sobre sus cabezas, en la multitud, yo estaba como... ¿Qué es lo que está pasando aquí?
Pero... nada... vino el momento cuando dije los primeros minutos de aquel sermón acerca del cristianismo norteamericano y entonces todos aplaudieron.

Clip:
“Lo que necesitan saber es que la salvación es por Fe, y fe en nadie más que en Jesucristo. Y la fe en Jesucristo es precedida y seguida por el arrepentimiento. Un darle la espalda al pecado, un odio por las cosas que Dios odia y un amor por las cosas que Dios ama. Un crecimiento en santidad y un deseo, no de ser como Britney Spears, no de ser como el mundo, y no de ser como la gran mayoría de los cristianos norteamericanos, sino de ser como Jesucristo.
No sé por qué están aplaudiendo, estoy hablando de ustedes. No vine aquí para recibir “Amenes”, no vine aquí para ser aplaudido. Estoy hablando de ustedes.

P. Washer:
Me di cuenta de que, por amor, tenía que decir algo que los sacara del trance en que estaban. Y entonces, eso fue lo que salió.
Y, ¿ sabes?, he escuchado algo ese sermón. Ha sido enormemente criticado. Y... sabes, Dios usó eso. Tenemos... tenemos testimonios, incluso en HeartCry.
Unos miles, decenas de miles de personas por doquier, desde Japón, de Australia, de Inglaterra, de Polonia, América del Sur. Es decir, por doquier. Personas que han sido salvadas. Pero, cuando reviso eso -sabes- en mi emoción, en mi quebrantamiento -o lo que sea- hice algunas afirmaciones como: “El arrepentimiento es parte de la salvación. El arrepentimiento es anterior a la fe, después de la fe.”
Eso no es lo que quise decir. No puedes hacer un orden cronológico de arrepentimiento y fe. La fe y el arrepentimiento ocurren... tienes que... si crees, te arrepientes y tienes que arrepentirte para creer. Es decir, está todo ahí junto.
Pero, lo que es asombroso, es que personas escriban, literalmente, páginas, criticando esa única afirmación intentando desechar todo el mensaje. Cuando, cuando no pueden ver que ha sido usado para salvar no sé a cuántas personas.
Eso... eso... y otra cosa. Déjame decir esto:
En la oficina de HeartCry, casi nunca he escuchado algún sermón o prédica de Internet o de cualquier blogs acerca de mí, o cualquiera crítica o cosa buena que se ha dicho.
Porque cuando todo esto empezó, nos era completamente desconocido, porque nosotros no lo pusimos en Internet. Sabía que si leía cosas que fueran positivas, podía tentarme mucho, enormemente, con adulación, y alejarme de Cristo. Si escuchaba cosas que fueran tremendamente negativas, podían destrozarme. Me he mantenido abierto a la crítica de hombres devotos. Pero, déjame decir esto, quiero dejarlo bien claro. Yo... se dicen muchas cosas sobre mí en Internet... quizás podría llamarse persecución.
Cuando Jesús fue perseguido, cuando la gente dijo cosas malas acerca de Jesús, siempre estuvieron equivocados.
Cuando personas hacen críticas de mí, no siempre están equivocadas. Somos hombres, somos débiles, somos defectuosos. Y sólo quiero que la gente sepa que cuando alguien dice algo sobre mí que no es positivo, puede estar en lo correcto. Y quiero que ellos sepan que sé que pueden tener razón. Y me quebranta, y sí quiero ser más preciso, sí quiero ser más santo.
No quiero poner fin a las emociones que Dios me ha dado, pero sí quiero que sean santificadas y que sean controladas por el Espíritu Santo.

Estuve recientemente en Detroit y, aparentemente, algunos de los que llamaron al programa de radio en que estaba, estaban diciendo:
“Ese hombre se ve tan miserable todo el tiempo, nunca se ríe, se ve tan triste.”
Y por eso, me gustaría referirme a ello por un momento. Antes que nada, la crítica más grande hacia mí de los amigos que me conocen, es que bromeo demasiado. Mi hogar es un hogar tan lleno de risas.
Somos "educadores en casa", pero los educadores en casa más estrictos pensarían que somos demasiado locos en mi casa. Mucha danza, pasan muchas cosas muy divertidas.
Sin embargo, estamos viviendo en una época en que miles de millones de personas están muriendo sin Cristo. Estamos viviendo en un tiempo donde millones de los llamados evangélicos ni siquiera entienden el evangelio. Estamos viviendo en un tiempo donde, si algunos de los héroes evangélicos más grandes fueran criticados simplemente a la luz del cristianismo histórico, se (com)probaría que son heréticos. ¿No debería alguien estar afectado/ inquieto/ turbado? ¿No debería alguien estar quebrantado? ¿Y no debería alguien pararse y decir “¡Esto está mal!”? Esto está mal. Y está mal. Está muy, muy mal.

Y sabes, miro al profeta Jeremías... Yo no lo llamaría el hombre más feliz del planeta. Él fue un profeta llorón.
Jesús fue conocido como "varón de dolores". Sí, Él fue un hombre de gran gozo. Pero también fue un "varón de dolores".
Estos son tiempos serios, solemnes. Nuestro país podría estar al borde de la destrucción. El oeste está siendo completamente destruido. Hay cosas sucediendo, juicios de Dios, otras cosas que están cayendo. Este no es un tiempo para reírnos en nuestro camino directo al infierno.
Tener gozo divino sí, pero darse cuenta de: estos son los peores tiempos, estos son los mejores tiempos.
Este es un tiempo en la historia en que mucho será determinado. Necesitamos hombres que vean esto y peleen. Y no vas a pararte contra el mundo, no estarás capacitado para pararte contra un – ya ni siquiera sé cómo se lo llamaría –un "iglesismo" en Norteamérica. No vas a poder pararte contra eso, sin personas realmente, de verdad, viniéndose encima de ti (acometiéndote). Pero vale la pena. Vale la pena, porque el evangelio está en juego, y porque las almas de las personas están en juego. Porque la gloria de Dios está en juego.

Clip:
“No estoy intentando ser duro por el sólo hecho de ser duro. ¿Se dan cuenta cuánto amor se necesita para pararse ante cinco mil personas y decirles que el cristianismo norteamericano está casi totalmente equivocado?
¿Saben que me va a costar el que nunca vuelva a ser invitado a algo así? Ser impopular.
¿Saben por qué se hace? No se hace porque te paguen bien. No se hace para que los hombres te amen. Lo haces porque amas a los hombres y, más que eso, porque quieres honrar a Dios.”

domingo, 20 de marzo de 2011

Un corazón y una pasión por Dios

http://www.youtube.com/watch?v=-kfxef9yti4

Título en inglés: "A Heart and Passison for God" by Paul Washer (8.09 min; porción del mensaje "Give Your Life Away" = "Entrega tu vida")

Quiero hablar contigo joven. Has aprendido las doctrinas de la gracia soberana, has leído a los Puritanos, felicitaciones.

No voy a perder el sueño esta noche porque las personas en el mundo necesitan de autoestima. No voy a perder el sueño esta noche porque no están teniendo su “mejor vida" ahora, o no están siendo todo lo que pueden ser, o su cuenta bancaria no está cuadrada.

Perderé el sueño esta noche –si pierdo el sueño esta noche– porque los hombres comparecerán desnudos ante Dios y serán arrojados al infierno.

Cuando yo predico y cuando tú predicas, ya sea acá o en el campo misionero, no puedes simplemente pensar que eres un comunicador de la verdad y dejarlo ahí.

Debes predicar como un hombre moribundo a hombres al borde de la muerte. Y veo eso en Pablo. Había pasión, había una urgencia. Él, simplemente, no estaba satisfecho. Si predicaba bien o comunicaba verdad, él anhelaba que Dios fuera honrado entre los hombres y anhelaba que los hombres fuesen santos, que fuesen semejantes a Cristo y capaces de regocijarse en el beneficio de su gran salvación.

Deberíamos ser personas dadas a instar a nuestros hermanos a una devoción cada vez más grande, a una piedad cada vez más grande, a abundar en más y más amor.

Él dice: “Yo los insto, hermanos”.

¿Qué los está instando a hacer? A hacer la cosa más difícil, escandalosa -en algunos casos algunos dirían absurda- que una persona pudiera alguna vez alentar a otra persona que haga: renunciar a su vida.

Sabes, el diablo mismo lo había entendido. En este sentido, puedes quitar los bienes de los hombres, sus casas, sus tierras. Puedes hacer absolutamente todo con ellos, pero en el momento en que tocas su carne es cuando realmente pruebas a ese hombre.

Renunciar a un vehículo, o una casa, un diezmo, es una cosa pequeña. Pero pedirle a un hombre que renuncie a su vida…

Sé que hay muchas nociones románticas sobre las misiones. Pero el libro de Elizabeth Elliot sobre Amy Carmichael está en lo correcto. Misiones es solamente esto: una oportunidad de morir. Una oportunidad de renunciar a tu vida por algo más grande que tú mismo, mayor que tú mismo. De modo de ir a pedirle a estas personas hacer lo que algunos consideran casi de culto, absurdo, ridículo, inmoral: renunciar a sus vidas, ofrecer sus vidas.

Ahora, vas a necesitar una medicina fuerte para motivar a una persona a hacer algo así. ¿Qué cosa en la tierra o en el cielo podría motivarle a un hombre a entregar su vida? Voy a instarte/alentarte a entregar tu vida a Dios, para ofrecerla como un santo sacrificio vivo a Dios.

Ahora, voy a hacer eso con base en lo siguiente: los 11 primeros capítulos de este libro que bosquejan las misericordias de Dios.

¿Y has decidido que someterías tu vida a aquellas directrices? Ves que hablamos de ser bíblicos. En nuestra adoración, ¿has recurrido a las Escrituras para descubrir lo que Dios desea de nuestra adoración?

“Bueno, sabes que nos gusta adorar de esta manera.”

A mí no me importa cómo te gusta adorar, porque ese no es el punto. ¿Qué dice Dios? Ves, en esta idea nosotros podemos fantasear esta cosa hasta la saciedad. Podemos espiritualizarla hasta la saciedad.

Podemos decir: “He dado mi vida -alguien dice- “bueno, he dado mi vida al campo misionero”. Eso no significa que al mismo tiempo has dado tu corazón a Dios. Porque puedes irte al campo misionero y ser impío, y carnal y banal. Mejor hubiera sido que te hubieras unido a National Geographic que a una agencia misionera.

¿Estás buscando, en simpleza, examinar tu vida? No estoy hablando de encontrar deducciones legalistas e imponértelas. Estoy hablando de los grandes principios de las Escrituras lidiando con cada aspecto de tu vida personal, aplicándolos a ti y procurando obedecerlos.

Déjame hacerte una pregunta: ¿Si te vas al campo misionero sin tomar lo que te he dicho como un serio esfuerzo no está la posibilidad de que la única cosa que vas a hacer allá después de haber cruzado tierras y mares, es hacer un convertido como tú mismo, que no es más que duplicar un hijo del infierno?

No hay demasiado cristianismo norteamericano, amigos, que necesite ser exportado. A menos que, como dijo Ravenhill, lo pongamos en algún tipo de pila de gente de mala fama y lo enviemos a una isla solitaria, y mientras se aleja del muelle cantemos juntos la Doxología.

Si vamos a esforzarnos para trabajar en misiones, entonces debemos estar motivados por un Dios al que conocemos. Un evangelio que conocemos. Y tenemos que ser un pueblo que ha intentado con gran empeño examinar sus vidas a la luz de las Escrituras, y conformar su vida a lo que Escritura dice.

¿Cuánto de lo que tienes, incluyendo la forma que te sientas en la silla, es formado por aquellos a tu alrededor y no por la Palabra? Es algo para pensar.

Bueno, creo que si vas a ser un misionero relevante esto es lo que tienes que hacer:

Quédate en tu pieza. No solamente ora, sino que estudia, para que cuando salgas de aquella pieza,tengas algo que decir sobre Dios. Y entonces estarás apto para salir de aquella pieza.

Escúchame, ya hice eso y no quisiera volver a hacerlo. Sales hacia allá con todo tu celo al medio de la plaza y empiezas a predicar y piensas, como joven misionero, que caerán ángeles del cielo y que el coro de aleluyas va a estar cantado. Millones de personas se convertirán y ellos van a tirarte sobre sus hombros y harán una estatua de ti.

Eso no es lo que va a suceder. Lo que va a suceder es esto: vas a ir allá y vas a predicar. Y vas a predicar, y cuando la multitud empiece a escucharte, alguien en algún lugar se va a parar y te va a llamar demonio y toda la multitud se volverá a ti. Van a agarrar tu pequeño púlpito y tu micrófono improvisado y todos tus "trataditos"/folletitos y te van a tirar en la calle.

Vas a requerir de mucho más que de un celo romántico por las misiones para pararte, agarrar tu pupitre y tus folletos y caminar directo allá y predicar otra vez. Vas a requerir de una pasión por Dios, que es generada del conocimiento de Él.

Y es la misma cosa para todo en la vida cristiana.

Pocos - Ravenhill/Piper/Washer/Conway/Leiter

http://www.youtube.com/watch?v=HkLLOH7qXPg

Título en inglés: "The Few - Piper/Washer/Ravenhill/Conway/Leiter" (9.37 min; compilación de citas de estos predicadores hecha por I'll Be Honest)

El video empieza así:

Muchas personas en aquel día dirán: “Señor, Señor” y Él dirá: “Nunca los conocí”.


Leonard Ravenhill:

Bueno, quiero decirte esta noche… creo que la misma cosa pasa en nuestras iglesias cada domingo. Las personas están "repletas" (tan llenas, que no pueden contener más). Estamos intentando derramarles el agua de la vida, y las pobres almas, que están condenadas y perdidas, no pueden recibirla.

Han escuchado la misma predicación año tras año diciendo las mismas cosas de la misma forma.

Él no ha derramado una lágrima desde que dejó el vientre de su madre. Se fue al seminario y consiguió una cabezota grande y un alma encogida/diminuta.

No hay esperanza. Esta generación llenará el infierno más rápido que cualquier otra generación -somos/estamos tan corrompidos- a menos que Dios en Su misericordia nos llene.


John Piper:

(Hebreos 12:14) Hay una santidad, sin la cual nadie verá al Señor. Yo realmente creo eso.

Hay una vida práctica diaria de rectitud sin la cual nadie entrará en el cielo, lo que significa que Jesús dirá a algunos cristianos profesos en el día del juicio: “Nunca los conocí, apártense de mí, hacedores de iniquidad.” Aunque ellos digan: “Señor, Señor, hicimos obras poderosas en Tu nombre, y fuimos a la iglesia todos los domingos", Él los desechará como malhechores, porque no tuvieron la santidad sin la cual nadie verá al Señor.

También significa que hay muchas iglesias a las que asisten personas que piensan que son salvas porque una vez oraron para recibir a Jesús, sin darse cuenta de que la prueba de la legitimidad de esa oración es la perseverancia en la fe y en la santidad.

Aquél que permanece hasta el fin será salvo, no aquellos que permanecen medio camino hasta el final, y después abandonan. Creo que mi ministerio sería un fracaso si vinieras a esta iglesia 5, 10, 20, 30 años y después te fueras al infierno por toda la eternidad, porque nunca aprendiste a pelear la batalla de la fe y preocuparte de la vida eterna.

Podría tener éxito persuadiéndote de que hay una santidad sin la cual no puedes ver al Señor, solamente para que te lances en su búsqueda de una forma que se vuelva en tu contra y te destruya.

La Biblia deja bien claro que hay una forma de buscar la justicia que lleva al infierno.


Paul Washer:

Cuando Él habla sobre los pocos encontrando la vida eterna se refiere a aquellos que profesan Su nombre. De entre los que llaman a Jesús "Señor" son pocos que encuentran la vida eterna.


Tim Conway:

Nadie se propone a ir al infierno. Todos piensan en estar bien con Dios antes del fin. Y la mayoría de los hombres naufragan. Habrá pocos que Lo encontrarán.

"¿Quieres decir, todas aquellas personas que simplemente vivieron toda la vida determinados, como si quisieran ir al infierno?"

Lo hombres no esperan irse al infierno, y la mayoría se va.


Paul Washer:

Porque ya sabemos que estas personas se consideraban a sí mismos discípulos y llaman Jesús “Señor, Señor”. Pero sus vidas no estuvieron marcadas por la voluntad de Dios. En la suma de todo esto/ En resumen, esto es lo que está diciendo: “Apártense de mí aquellos que se consideraron mis discípulos y aún enfáticamente me declaraban Señor, pero que no se comunicaron conmigo y vivieron como si Yo nunca hubiera dado una ley para ser obedecida.”

Acabo de describir al cristianismo norteamericano. El 60 ó 70% de las personas en este país creen que son convertidas, porque alguna vez en sus vidas hicieron una oración.


Leonard Ravenhill:

Me quedo atónito, desconcertado, confuso, pasmado, cuando las personas me dicen que en Norteamérica tenemos 75 millones de personas llenas del Espíritu Santo. Y somos la nación más corrompida de la tierra… ¡qué va!


Tim Conway:

Déjenme decirles algo: hombres perdidos, mujeres perdidas, es lo que son la mayoría de las personas.

Acuérdense: “Pocos son los que lo encontrarán.”

¡Ah, sí!, hay muchas personas religiosas, muchas personas que piensan que se van al cielo, muchas personas que en aquél día dirán: “Señor, Señor” y Él dirá: “Nunca los conocí.”


Paul Washer:

Lo que Él está diciendo es: “No todos los que enfáticamente me declaran ser Señor entrarán en reino de los cielos.” Esto no es algún discipulado secreto. Esto no es una cosa oculta. Esta es una persona que enfáticamente dirá: “Sí, soy cristiano.”

Él dice: No todos los que me dicen esto entrarán en el Reino de los Cielos, lo que es sinónimo de: No todo el que dice esto, es verdaderamente cristiano.


Charles Leister:

Mi pregunta es: ¿A alguien le importa? ¿Nos importa que el mundo se esté yendo al infierno?

Piensen en Sodoma y Gomorra. Miren lo horribles que fueron los pecados de Sodoma y Gomorra. Lo fueron, pero Él dice: Será más tolerable para Sodoma y Gomorra, que para los jóvenes que se han sentado en reuniones y han escuchado acerca del Señor Jesucristo y no han creído en Él. Éso, es maldad más allá de la imaginación.

¡Y tenemos que tener nuestras mentes renovadas en esto para entender. Hemos tenido un vislumbre de lo que era infinitamente amor: ¡Dios ha venido al mundo, y vivido entre los hombres!

Y si quieres hablar acerca del pecado, y convencer a los hombres sobre el pecado: ¡Exalta al Señor Jesucristo!


Leonard Ravenhill:

El milagro más grande que Dios puede hacer es sacar a una persona impura de un mundo impuro, hacer a esa persona santa, devolverla a un mundo impuro y guardarla santa. ¡En medio de una generación deformada, pervertida y perversa!


Charles Leister:

Él es digno de adoración, estés o no yéndote al infierno. Al final, Él aún es digno de adoración por lo que ha hecho.

Si miras a lo que Él ha hecho en la cruz, si miras la gracia del Señor Jesucristo, ¡Él no le debe nada a nadie!

¡Él no necesita salvar a nadie! Todos en este mundo deberían postrarse ante Él y adorarle a causa de lo que Él ha hecho, tanto si consigues algo de eso o no!

Él es digno de adoración.


Leonand Ravenhill:

Saben, estamos predicando un Evangelio aceptable hoy, haciéndolo tan indoloro como podemos.

Y todo lo que hacemos es darle a las personas una vacuna para ponerlas a dormir, para que se vayan al infierno más rápido.


Paul Washer:

¿Quieres saber qué vale tu profesión de fe en Jesucristo? Tu confesión de fe en Él, ¿Qué vale?

La respuesta es esta: vale absolutamente nada.

No importa cuán enfáticamente uno declare ser cristiano no es la prueba de si su cristianismo es verdadero o no. ¿Cuál es la prueba?

Seguimos y vemos esto: “Pero aquel que hace la voluntad de Mi Padre que está en los cielos entrará.”

Ahora, Él no está enseñando de ninguna manera cómo funciona la salvación, para nada/en lo absoluto. Él no está enseñando que los hombres entrarán en el Reino de los Cielos por su habilidad para realizar la voluntad de Dios. Eso no es lo que Él está enseñando. Si piensas así, estás poniendo la carreta antes de los bueyes. Lo que Él está enseñando es simplemente esto: aquellos que han creído verdaderamente, lo hacen por el poder del Espíritu Santo por el cual han sido regenerados, y hechos nuevas creaturas a través de este trabajo milagroso de salvación, y el trabajo continuo del Espíritu Santo en sus vidas. Sus vidas y la manera de vivir son cambiadas; tanto así que el verdadero cristiano lo es por la creencia en Jesús. Pero se sabe que él verdaderamente cree en Jesús a causa de los cambios en su vida, y esos cambios están marcados por la conformidad a la voluntad de Dios.


Leonard Ravenhill:

Yo creo que estamos camino a los días más oscuros que la humanidad ha conocido jamás. Tan oscuros que harán que las eras/épocas más oscuras se parezcan al medio día.


I'll Be Honest termina el video con lo siguiente:

ESFUÉRCENSE POR ENTRAR POR LA PUERTA ESTRECHA, PORQUE LES DIGO QUE MUCHOS TRATARÁN DE ENTRAR Y NO PODRÁN. (LUCAS 13:24)

Pocos son los que lo encontrarán… ¿Eres tú uno de los pocos?

¿Por qué ese hombre siempre predica tan duro?

http://www.youtube.com/watch?v=kfZB7GjG0HE

Título en inglés: "
Why is that man always preaching so hard?" (Paul Washer) (10.36 min, subido por LaneCh)

¿Quieres saber el por qué?

Escúchame: el mayor juicio que puede caer sobre un pueblo es cuando Dios retira de ellos la revelación de Sí mismo.

Ves, te has sentado aquí y allá, y has escuchado palabras poderosas y magníficas sobre el evangelio de Jesucristo. Imágenes llegan a ti a través de la predicación de los atributos de Dios, de Quién Es Él, pero en el Día del Juicio todo será quitado de ti y no verás a nada ahí.

No habrá ninguna revelación de la que aprender, ninguna relevación para creer, ¡se acabó!

Dios dijo: “Me he hecho conocido a ti, pero, aunque conociste a Dios no me honraste como Dios ni diste gracias.” Se fue. Andarás a tientas en la oscuridad y serás entregado a la oscuridad eterna.

Además, no hay un arco iris en este trono. El trono en el capítulo 4 tiene un arco iris. No hay ningún arco iris aquí.

El arco iris representa los pactos de Dios, las promesas de Dios. ¿Qué te dijo Él? Todo el día he extendido mis manos a un pueblo.. Todo el día, promesa tras promesa. Me maravillo en Isaías 55. Porque en Isaías 55 y 56 hay tan grandes promesas dadas a gente malvada basadas en la obra del Mesías. Y en el capítulo 54 basado en la obra del Mesías hay tantas grandes promesas dadas, que en el 56 Dios tiene que convencer al pueblo de que es realmente verdadero.

Es tan bueno -es demasiado bueno para ser verdad- pero Él dice: No, ¡es verdad!. Les prometí esto y aquello y lo demás, todo en Mi Hijo. ¡Tan sólo vengan!. Y ellos no lo hicieron. Pero en el día del juicio no se darán promesas. No habrá pacto. Ningún trato se hará en aquel día. No hay arco iris.

Además, no hay pequeños tronos acá en Apocalipsis capítulo 20. En el capítulo 4 había pequeños tronos también. Es un Dios severo. Por mandato, ha retirado todo otro trono y Dios está diciendo: “¡No, estas personas negociarán conmigo solamente/a solas!”

No habrá ángeles sentados sobre tronos a mi entera disposición para darles una palabra a ellos, nadie para ministrarles... ¡No! Soy su Dios, les he dicho que se prepararan para encontrarse con su Dios. No lo hicieron. Ahora, me tienen solamente a Mí con quien tratar.

Además, en aquél trono no habrá un coro angelical, ningún canto gozoso. Ninguna voz de alegría se escuchará. Aún las más grandes criaturas, las criaturas vivas que se paraban alrededor del trono clamando: “¡Santo! ¡Santo! ¡Santo!” día y noche continuamente han sido sacadas. Ninguna palabra de aliento, ninguna esperanza; sin ayuda, sin música.

Canción tras canción has escuchado en esta iglesia, y en esas canciones promesa tras promesa del poder salvador de Dios en Jesucristo. En aquel día, todas esas canciones serán quitadas. No habrá nada para que escuches, excepto el silencio de un golpe de martillo: “¡Juzgado!”

Además, no habrá más rayos o truenos.

Dices: “Bien, eso es algo bueno.”

No, no lo es. Es algo terrible. Déjame compartir contigo, “¿Por qué ese hombre siempre predica tan duro?” “¿Por qué él siempre está diciendo cosas tan horrendas?” “Si tan sólo se refrenara un poquito habría muchas personas en la iglesia.” “¿Qué hay de esos duros dichos y palabras duras?” “¿Por qué nos golpea/hiere tanto?”

¿No entiendes que los truenos y los rayos eran advertencias, resonando desde el Sinaí? El día del Juicio -cuando Dios juzgó a Adán y Eva- ... ¿no entiendes que esos juicios también eran actos de misericordia?

Él dijo: Van a vivir en un mundo caído, y cada vez que suden, y cada vez que sufran soy Yo gritándoles: – ¡Caído, Caído! ¡Vuélvete, Arrepiéntete! ¡Ven y sé salvo!

Cada vez que una mujer da a luz en dolor, es Dios gritando: “¡Estás caída, caída, regresa a mí y sé salva!

Cada trueno, cada relámpago del Sinaí era: “No puedes guardar esta ley, ¡Necesitas un Salvador!

Cada trueno y relámpago en las prédicas… cada pala bra dura es Dios diciendo: ¡Mira/Fíjate, esto es real!


Pero aquí, el juicio de Dios está demostrado en que los truenos y relámpagos han sido removidos. Ya no hay necesidad de eso, porque ya no hay necesidad de advertencia. Porque sólo se advierte al hombre para que corra por las promesas, pero cuando ya no quedan promesas no hay necesidad de avisos.

Además, no hay 7 antorchas representando el Espíritu de Dios, se fue. El Espíritu de Dios es el único medio por cual un hombre puede ser salvo. Toda gracia y todo conocimiento de Dios es comunicado a los hombres por medio de la obra del Espíritu Santo. Pero aquí en el día del juicio, el Espíritu se ha ido. Y sin Él, no hay esperanza de salvación.

Además, no hay una vereda celestial haciendo un camino de vuelta a Dios y no hay mar de cristal representando la paz con Dios, ¡se fue!

No hay ángeles volando con brasas rojas y calientes para quemar el pecado de la boca de los hombres ¡No están! Y se han ido, porque no hay más un Cordero viéndose como si hubiera sido matado. Porque Aquel que fue matado está sentado sobre el trono juzgando al mundo como el Rey de Dios y el Mesías de Dios.

Y no hay voz de trompeta diciendo como en el versículo 1: “Suban aquí, acérquense.” Solo hay una voz de doble filo diciendo: “¡Apártense de mí, hacedores de iniquidad. Nunca los conocí!”


¿Puedes imaginarlo? No lo digo para herirte, no lo digo para molestarte o para hacer que tengas un día terrible, ¡pero tienes que ver la seriedad de rechazar a Cristo!

En aquel día Dios en persona dirá: “¡Depreciaste a mí Hijo! Has llamado impura a la sangre del pacto, como si fuera la sangre de un cerdo! ¡Has ofendido mi Espíritu de Gracia! ¡Apártense de Mí hacedores de iniquidad !” Va a suceder... va a suceder.


Aquel que se sienta en el trono – ¿Quién es el que se sienta en el trono? Bueno, como he dicho, la Biblia dice que Dios está sentado sobre el trono. La Biblia también dice que Jesucristo, Su Hijo, está sentado sobre el trono. Se llama el Asiento del Juicio de Cristo, y el Asiento del Juicio de Dios, y aquí está el propósito de Juan, ... no es para delinear o para dividir o para ser especifico, es simplemente para decir esto: ¡En aquel día serás juzgado por la plenitud de la Deidad! No será el hijo de un carpintero, no será un Jesús tierno y humilde, no será un pastor con un escondite. ¡Será Dios en toda la plenitud de la deidad desnuda, cegándote, con (Su) santidad y justicia!

Además, deberíamos notar que Aquel que está sentado sobre el trono está sentado. Tan sólo mira eso: Él está sentado. El hecho de que Dios esté sentado sobre el trono representa una resolución, una perfecta determinación soberana. Él no está molesto, Él no está ansioso, esto no le agarró por sorpresa. Es el mundo el que será pillado desprevenido en aquel día, no Dios. Él planeó esto desde toda la eternidad. Me recuerda un pasaje en Salmos 2, dónde dice:

¿Por qué se amotinan las gentes, y los pueblos piensan vanidad? Se levantan los reyes de la tierra, y los príncipes consultan unidos contra Jehová y contra Su ungido, diciendo: Rompamos sus coyundas, y echemos de nosotros sus cuerdas. El que mora en los cielos se reirá; el Señor se burlará de ellos.

¿Te das cuenta de que en el día del juicio, si cada criatura en el infierno y cada criatura que alguna vez ha estado en la tierra – toda la creación completa – fuere a levantarse contra Aquel sentado sobre el trono, ellos no tendrían la fuerza del más débil de entre ellos levantándose por sí mismo. Sería como un ácaro golpeando su cabeza contra el mundo de granito.

Éste es el Dios con quien tienes que tratar. Cada uno de ustedes. ¿Te asusta? Si la sangre de Cristo no es tu esperanza, debería asustarte.

sábado, 19 de marzo de 2011

La Cruz que los predicadores modernos ponen en la parte de atrás

http://www.youtube.com/watch?v=1QbWYFsI2G8

Título en inglés: "The Cross the Modern Preachers Put in the Back" (10.22 min, cargada por LaneCh)


Y ahora, voy a ir al Jardín por un momento:“Padre, deja que este cáliz pase de mí, deja que esta copa pase de mí. Gotas de sangre. “Deja que esta copa pase de mí.”
¡Estos predicadores! Ellos dicen: "Ah, Jesús no quería ir a la cruz romana".
¡Eso es una mentira!
"Ah, Jesús... -estos predicadores carismáticos- Jesús le tenía miedo al diablo".
¡Blasfemia!
"Ah, esa cruz romana, ese azote, Él no quería ir a eso".
¡Absurdo!

Déjame hacerte una pregunta, sólo por un segundo. Quiero que pienses sobre esto sólo por un momento:
Después de la muerte y resurrección de Jesucristo -desde aquel tiempo- se estima que 50 millones de hombres y mujeres y niños han muerto por sus profesiones de fe en Jesucristo. Murieron como mártires.
Desde la iglesia primitiva hasta la época de los puritanos y de la Reforma, ¿saben?… vamos a usar a la iglesia primitiva como ejemplo. Muchos seguidores de Jesús fueron crucificados. No sólo crucificados, fueron crucificados cabeza abajo. No sólo crucificados cabeza abajo, los cubrían de brea y les prendían fuego para proveer de luz a las calles de Roma. Pero muchos de esos seguidores de Jesús - con cadenas que les eran quitadas para ser crucificados- cantaban himnos llenos de gozo.
¿Honestamente crees que el Capitán de nuestra salvación está en el jardín acobardándose de una cruz aún cuando Sus discípulos fueron a la misma cruz con gozo en sus corazones? ¿Piensas que el Capitán de nuestra salvación es tan débil?
¡Piensen, caramba! Jesús no tenía miedo de la cruz, o de un clavo, una lanza o una corona de espinas. ¿Qué había en la copa? Nunca olvidaré esto:
Estaba en una escuela reformada -escuela teológicamente reformada- muchos años atrás. Fui allá y dije: “Bien, me han llamado para predicar. Aquí estoy.”
Ellos dijeron: “Predicarás allá afuera, en el auditorio.”
Dije: “Maravilloso, ¿qué edades?”. Y ellos dijeron: “Bueno, desde Jardín Infantil hasta el duodécimo grado (último año).”
Dije: “Bueno, predicaré sobre la expiación. Ese un rango algo amplio, ¿no creen?”
Ellos dijeron: “No será (un) problema, Sr. Washer.”

Así que entré allá y mientras estaba predicando, me detuve y dije: “¿Qué había en el cáliz? ¿Qué fue lo que hizo temblar a Jesús?”
Y nunca olvidaré a esta pequeña de 8 años que alzó la mano y dije: “¿Sí?” Y ella se paró, se puso a un costado de su mesa, y dijo: “Sr. Washer, la ira de Dios estaba en la copa. El odio intenso de Dios por todo lo que es malo estaba en la copa.”


¿Una cruz de madera? Todos los hombres están bajo la feroz, justa ira de Dios a causa de su despreciable maldad. Alguien tenía que beber esa ira. Jesucristo en aquel madero cargó la culpa de Su pueblo y se paró en el lugar de ellos. Entonces, todo el santo, justo odio; la ira, juicio y justicia de Dios como una luz blanca enceguecedora vino, aplastando la cabeza de Su Hijo Unigénito. ¿Alguna vez has leído “Y a Jehová le agradó aplastarlo?" (Isaías 53:10). Machacarlo hasta hacerlo polvo. Imagínate por un momento una represa de 10 mil millas* de alto y 10 mil millas de largo y tú parado debajo de eso. Una milla detrás de la pared y de repente, en un segundo, la pared es empujada y toda el agua viene de golpe sobre ti, pero justo antes que te llegue a los pies, el suelo se abre y se la traga. *(1 milla = 1609 m)

De manera que la ira de Dios (=la copa) destinada para el pueblo/la gente, El Hijo de Dios tomó esa copa de la mano de Su Padre y Él bebió cada gota. Y cuando gritó: “Consumado es” Él la dio vuelta y ninguna gota cayó. La bebió toda.
Si resumiera la copa de la ira en el Antiguo Testamento sería algo como esto, Dios diciendo: 'A causa de la perversidad y la rebelión de las naciones, les enviaré la fuerza completa de Mi ira. Les enviaré mi copa y se las haré beber y ellos la tomarán y tambalearán y morirán'. Pero en aquel madero, Cristo bebió la copa.

Has escuchado esta historia de Abraham y su hijo: Vete a aquella montaña y descuartiza a tu único hijo. Abraham se va a aquella montaña en obediencia. Ata a su hijo. Su hijo no ofrece ninguna resistencia, según parece. El viejo va por el cuchillo, pone su mano sobre la frente de su hijo y mientras la mano baja, es detenido. Dios proveerá. Y entonces, ¡que historia maravillosa!
ahí estaba... el animal atrapado por sus cuernos en el arbusto. Qué lindo final de la historia.
¡No fue el final! ¡Fue el intermedio! Cientos de años después, en un monte llamado Calvario, Dios el Padre pone Su mano sobre la cabeza de Su Hijo Unigénito y Lo descuartiza. ¡Alguien tenía que morir!

¿Ves?, esta es la cruz que todos esos predicadores de los días modernos ponen en la parte de atrás de la tienda, no en la vitrina de la tienda. Porque es algo vergonzoso. Es una cosa horrenda. Una cosa terrible. Algunos de ustedes se están mirando unos a otros como si (quisieran decir) “Yo nunca había oído algo como eso antes.
Absolutamente, y ese es el por qué la cruz tiene tan poco poder en tu vida. Esta es una cosa horrenda, una cosa despreciable. No el tipo de cosa que usas alrededor tu cuello.
Alguien tenía que morir. La justicia tenía que ser satisfecha. Para demostrar amor, Dios primero tenía que alejar el pecado, y sólo había una manera de hacerlo: La muerte del Hijo Unigénito de Dios. ¡Él murió!

¿Ves?, y es acerca de esto lo que la vida cristiana es. Pablo dice en Romanos capítulo 12 -él implora al pueblo- dice: “os insto, como un pastor instaría a un rebaño amado. Él dice, “os insto”,
¿A hacer qué? “A entregar tu vida, a ofrecer tu vida como un sacrificio vivo y santo grato a Dios.” Pero Pablo da la motivación. Él dice, "para entregar tu vida debido a… basado en las misericordias de Dios. ¿Y de qué está hablando? De lo que debería motivarte a rendir tu vida por Cristo a través de las misericordias de Dios.
Pero en Romanos capítulo 12 las misericordias de Dios se refieren a los primeros 11 capítulos del libro de Romanos. Donde, en los primeros 11 capítulos del libro de Romanos Pablo explica todo lo que Dios ha hecho por nosotros en Cristo y él reflexiona: "ya que Dios ha hecho todo esto en Cristo, ahora entreguen sus vidas por Él".
Y cuanto más sabes de la cruz, más eres dado a entregar tu vida por Él. Él ya no es más este pequeño accesorio que pones en tu vida para hacerla mejor. Él ES tu vida. Eres consumido por Él. Eres constreñido por Él. Cada pensamiento, cada juicio, cada palabra, cada cosa que haces. 
¿Por qué hace esto, caballero? ¿Por qué hace eso, caballero? ¡Porque Cristo ha derramado Su propia sangre por mi alma!
El amor de Dios en Cristo me constriñe. Él murió.

Autor del sacrificio.
La creación envía el llamado.
Autor del sacrificio.
Una vida para pagar por todos ellos.
Autor del sacrificio.
El único inocente debe ser sacrificado.
Autor del sacrificio.
Y trae al hombre de vuelta a Dios otra vez.

Él murió.
Es asombroso lo que el Espíritu puede hacer cuando está aquí. Es asombroso lo que no es hecho cuando Él no está. Pero, Cristo murió. Esas palabras deberían ser suficientes para romper tu corazón en mil pedazos y arrojarte al piso y alabar. Cristo ... murió por ti. Pero Pablo nos dice… la Escritura nos dice que Él no permaneció muerto. No es sólo la muerte de Jesucristo la que nos salva, es también la resurrección de Jesucristo. Tiene una gran parte en la historia. Si Él hubiese permanecido muerto no habría nada. No habría esperanza. Todas las cosas se harían añicos/trizas. Pero Dios ha reivindicado a Su Hijo Unigénito al levantarlo de los muertos. Y al levantarlo de los muertos, Dios ha puesto Su sello y nos ha dicho -declarado públicamente por medio de la resurrección de Jesucristo- que Su sacrificio fue suficiente para expiar los pecados de Su pueblo.

Cristo murió. Cristo resurgió de entre los muertos. Y Cristo ascendió 40 días después a la derecha de Su Padre.