lunes, 25 de abril de 2011

Jesús ES Señor - Autor: Tim Conway


Título en inglés: "Jesus is Lord" (10:34 min; puesto por illbehonest)

Por sus obras, ellos Lo niegan. Puedes decir una cosa, y por tus obras negar lo que dices. De modo que sólo confesar a Jesús como Señor no te salva. 
Es esa creencia desde tu corazón que se origina en una confesión, a través de palabras, a través de la vida. Es cuando estás en la familia y están diciéndote: 'Cierra tu boca, no queremos escuchar eso'.  Pero vas a confesar a Cristo como Señor. 
Es en el lugar de trabajo. Pero ellos dicen:  '¡No queremos nada de eso, vete/ándate con tu Cristo, ándate con tu cristianismo, ándate con tu religión, no la queremos!'. 
Pero lo confiesas allá, donde es difícil.
A las personas les encanta hablar de esta forma: 'Soy salvo. Me salvé cuando tenía 3 años. Soy bautizado. Fui salvo.'
A las personas les encanta lanzar ese término por ahí: 'salvo, salvo, salvo.'  Lo escuchamos a menudo.
Las personas entran acá. “¿Eres salvo?” “¡Ah, sí!, soy salvo.”
No son salvas, pero dicen que lo son. Porque no han doblado sus rodillas a Cristo. No hay confesión de Su Señorío en sus vidas.  No, por sus obras.  Se les  podría decir... “¿Crees que Jesús es Señor?” “Ah, sí. Creo que Él es Señor."  Luego caminan hacia afuera y son esclavos del pecado.  No Le están obedeciendo. ¿No te das cuenta de lo que dice? '¿Por qué me dices "Señor, Señor" y después no haces la voluntad de mi Padre que está en el Cielo?' [Mateo 7:21] No son los que dicen “Señor, Señor”.  Son los que hacen la voluntad del Padre.
Dices: “¿Tienes que estar haciendo algo para ser salvo?” 
Estoy diciendo esto: si verdaderamente eres salvo.  Si realmente tienes la fe que salva, te someterás a Cristo, porque eso es lo que pasa. 
Dios dice: 'Bajo el Nuevo Pacto voy a escribir mis Leyes en sus corazones. Voy a quebrantar su corazón. Voy a quitar aquella vieja cosa de piedra y voy a poner un corazón de carne. Mis leyes no serán gravosas.' [Ezequiel 11:19]   
Y si dices que eres Cristiano, 1ª de Juan capítulo 2 dice: 'pero si no guardas Mis mandamientos eres un mentiroso.'
El verdadero cristianismo es aquel que se somete al Señorío de Cristo. Ese es el único. Las personas bromean todo el tiempo con esta idea de ser salvo. “Soy salvo.” 
Algunas personas se presentan: “Sí, he sido salvado 5 veces, 6 veces.” 
Bueno, esa no es la salvación que yo quiero. Si la puedes perder no es buena. Eso no es ser salvo. 
¿De qué eres salvo? Seguramente no eres salvo, si la puedes perder.

El otro Jesús es proclamado por los emisarios de Satanás de esta forma:  
'Bueno, Él es un Salvador. Él no demanda nada de ti. Y tú solamente, sólo cree... sólo cree... sólo cree.  No quisiéramos decirte que tienes que arrepentirte o volverte y ser como un niñito. O que te tienes que someter.  Nada de eso. Si decimos eso, es estar agregando obras a la salvación.'
¡Ah, suena bien!, pero es un sesgo engañoso del verdadero Evangelio. Está siendo dicho por la voz arrastrada /deslizante de las serpientes.  Cada vez que alguien viene y dice que puedes tomar a Cristo como Salvador, pero no como Señor, es el aliento fétido de esa serpiente, con toda seguridad. Amigos, esto pasa a menudo.
“Por esto sabemos que Lo conocemos.” ¿Qué significa eso, "conocerlo"?. 
¡Significa: Verdadera Fe!... Conocerlo.  Me doy cuenta que eso es relacional.  
Pero el hecho es que nunca puedes entrar en esa relación -esa relación salvadora- con Dios, a menos que haya fe verdadera. Si digo “Yo tengo fe verdadera” y digo “Lo conozco” y digo que “por esa verdadera fe he llegado a un real conocimiento salvador de Él”...
Juan dice: 'Yo sé'. 'Por esto podemos saber, por esto podemos probar nuestra Fe: si guardamos Sus mandamientos. 
Ahora, eso tiene todo que ver con Su Señorío. Todo. Si decimos que Lo conocemos, pero no estamos guardamos Sus mandamientos, dice que somos mentirosos y que La Verdad no está en nosotros. ¡Y aquí está el asunto!. Aquellos que son amos, aquellos que están a cargo, dan mandatos y esperan que sean seguidos por los que están subordinados a ellos.
Jesús da mandamientos. Él dice que eso ratifica/valida si conoces verdaderamente a Dios o no. Jesucristo dijo: “si me amas guardarás mis mandamientos.” Valida si tu amor por Cristo es verdadero o no. 
¿Ves?, puedes decir que crees en algo, pero si no estás deseando descansar tu vida en eso, entonces no es cierto. No crees. La Fe puede ser vista y puede ser probada por su inclinación/buena disposición a confiar en lo que se dice que se cree, y en hacer lo que se dice que se cree.
Si crees con el corazón que Jesucristo es Señor y confiesas eso con tus labios, entonces no negarás eso con tus obras.
¿No dijo Cristo: “Muchos me dirán en aquel día...” ¿qué?
Ellos lo están confesando, ¿no es así? Y todavía Él dice, ¿qué?
¿Quién entra en el Reino? “Aquellos que hacen la voluntad..." Ahí está /Eso es. Sumisión al Señorío. 
No es: todos los que confiesan "Señor". Es: aquellos que con su vida se someten al Señor y confiesan "Señor" los que serán aceptados en Su Reino.
Verás personas diciendo “Señor, Señor.” Él dice: “Apártense de mí, nunca los conocí."  Uds. son hacedores de iniquidad.  No son trabajadores que se sometieron a Mí.  Por sus obras Me negaron. Por sus obras mostraron que no tienen ley.  No guardaron mis mandamientos. Lo que es la real prueba de que no eres uno de aquellos que verdaderamente me conoce. Porque si dices que me conoces y no guardas mis mandamientos eres un mentiroso y la verdad no está en ti.
De esto se trata el Señorío.  Si dices "Señor", si me profesas o me confiesas como Señor, pero luego no haces las cosas que Yo digo, ¿Por qué lo dices? Es una contradicción.  
Y si  lees los siguientes 3 versículos, versículos 47, 48 y 49 verás que desarrolla este mismo caso /argumento. Él dice: si escuchas Mi Palabra y la haces, eres un hombre sabio. Si escuchas Mi palabra y no la haces, eres un necio y el día se acerca cuando vayas hacia la ruina.  
La única confesión de Cristo como Señor que es una confesión salvadora, es aquella acompañada por un corazón que cree en eso, por una vida que muestra que esa fe es real.
El señor no comparte Su trono con nadie.  Él entra y dice en Lucas 14:33 'A menos que abandones todo lo que tienes no puedes ser Mi discípulo'. Este Señor entra y dice : Yo seré Señor de todo.
Él ES Señor de todo. “Pero si vienes a Mí..."
Déjame decirte otra cosa, también.  Nosotros no hacemos a Jesús "Señor".  DIOS declaró que ÉL hizo a este Cristo tanto SEÑOR como CRISTO. 
Él Lo hizo. Nosotros no lo hacemos de esa manera.  Él ES así.

Hay gente por todos lados que te contará acerca de un Cristo que no demanda nada de ti. Te diré el por qué.
Porque los hombres quieren mantenerse en su pecado y ser perdonados de la muerte y la ira en el infierno. Entonces, por un lado mantienen su pecado y por otro lado quieren crear un Cristo que los llevará al cielo sin soltar todo su pecado. 
Cristo entra ahí y dice: 'Te salvaré, pero Me tienes que recibir como Señor. Tienes que abandonar todo por mi Señorío. Debes… te estoy llamando para…'. Cuando Él dice “Sígueme” eso es exactamente lo que Él está diciéndote que hagas. Abandónalo todo. Cualquiera sea la agenda que tengas. Cualquiera sea la agenda que tengas en la vida para hacer dinero, para ser famoso, para ser bien educado, lo que sea. Él dice: “Déjalas.  Eso no es decir que, como Señor, no te va a dejar ir a la escuela. Eso no es decir que, como Señor,  Él no te va a dar mucho dinero
Te diré algo. Un lugar en que el corazón de los hombres puede ser probado, es el área del dinero. Él entra y dice: 'Lo quiero todo.'
“¡Señor, es 10%!” Él dice: 'Lo quiero todo. Yo soy Señor. Yo soy Señor de señores. Yo soy Señor de todo. Yo soy Tu Señor. Yo soy Señor de todo lo que tienes.'
“Sí, ¿pero no es 10…?” Él dice: “Lo quiero todo y te explicaré como quiero que lo uses”

Otra vez, esto no es duro, esto no es tortura.  ¿Sabes lo que Él nos está diciendo?: '¡Quiero mostrarte cómo usarlo para tu mayor beneficio eterno!'
Puedes no reconocerlo como Señor ahora.   
Puedes decir: 'Voy a vivir mi vida. Voy a gobernar/controlar mi vida. Voy hacer lo mío/lo que  me dé la gana.   ¡No quiero que se me diga qué hacer!'.   Pero en aquel día doblarás tu rodilla a Él.  Y sabrás que Él es Señor. Y cuando Ellos ordenen a aquellos ángeles que te expulsen, ellos le obedecerán. Ellos obedecen a Su Amo todo el tiempo. Y te irás a aquel lago de fuego.
Pero si doblas la rodilla ahora, ¡ah!, encontrarás en Él un Amo gentil. Su carga no es pesada...
Él es amable y Él es bueno.  Pero es SEÑOR.

¿Es la teología tu ídolo? Autor: Tim Conway

http://www.youtube.com/watch?v=UoQ860GEIp0&feature=BFa&list=PLF2105194225D86AE&index=23

Título en inglés: "Is Theology your idol? - Tim Conway” (9.33 min, puesto por illbehonest)
(de “Pregunte al Pastor Tim Conway”:  Respuestas a preguntas frecuentes)

Ésta la hace Michael Kennedy.  Él dice:
He estado estudiando una importante cantidad de teología últimamente.  
Creo en la Teología Reformada.  Creo que el arrepentimiento es esencial para la vida de un cristiano.  Mi pregunta es:
¿Es posible que la teología -aun cuando sea bíblicamente correcta y verdadera- llegue a ser un ídolo, o una adicción?

Bueno, ¿saben?, la Biblia en un lugar -concretamente en 1a. Corintios 8, versículo 1- habla sobre el conocimiento que infla/ infatúa /envanece.  ¿Alguien ha leído acerca de eso?.  Y, sin embargo, si vamos a algún otro lugar... ya hice mención a Filipenses 1:9 un par de veces, así que vamos a mencionarlo de nuevo:  “Esto es lo que pido en oración: que el amor de ustedes abunde cada vez más en conocimiento y en buen juicio,” (La versión en inglés dice “... conocimiento y discernimiento”)
¿Todo conocimiento es malo?
Pablo está orando para que la gente tenga conocimiento y discernimiento.  

Así que hay un conocimiento que infla/infatúa/envanece.  
Hay un conocimiento que aumenta nuestro discernimiento.

Hay un conocimiento que infatúaHay también un conocimiento que humilla, ¿no es así?  Quiero decir que podemos aprender algunas cosas que realmente nos humillen y hagan que nuestra estimación de Dios sea mayor.

Me refiero a que ustedes han aprendido antes algunas cosas que encontraron muy humilladoras y los hicieron sentir terriblemente pequeños ante el Gran Dios.
No todo conocimiento es malo, pero no todo conocimiento es bueno.  

Hay un conocimiento que infla/infatúa.  Y diría esto: Miren, la teología puede ser muy similar a las traducciones de la Biblia, ¿cierto?  Quiero decir, la Biblia “King James” (equivalente a la “Reina-Valera”) es buena?   
¡Amigos /Familia!,¡fue una excelente traducción!  ¡Resistió durante cuatrocientos años! ¡Tremendo! Dios usó esa traducción en maneras poderosas y tremendas.
¿Las doctrinas de la Gracia son buenas?  ¡Con toda seguridad lo son!
Pero les diré esto:
¡Hay calvinistas en el infierno!  Y hay gente de la sola versión “King James” /”Reina Valera” en el infierno!  ¿Y sabén que?   A mi juicio, he descubierto algunos calvinistas profesos, y sólo versión “King James”/”Reina Valera” profesos que son... ¡Miren!, no quiero hacer un estereotipo y no quiero...  y, obviamente hay chorrocientas/tropecientas excepciones a esto; pero, algunas de las personas más irascibles que profesan ser cristianas pueden ser … ¿saben?... pueden ser gente con la que no es agradable estar cerca de ellos, algunas veces.

 
Y, ¡miren!, sea cual sea la Biblia que tienen para que les enseñe a amar más y más a los cristianos. Sea cual sea la doctrina que tengan... quiero decir... cualquiera sea la teología que tengan con el fin de que les esté revelando más y más a Cristo, con la que ustedes puedan adorarlo cada vez más... 

Tantos quieren aprender estas doctrinas para poder argüir, para que les permitan debatir.

¿Han oído hablar de Carlos Simeon?
Simeon fue un evangélico calvinista.  Vivió por allá por 1700.  Déjenme contarles acerca de él.
Él tenía poca simpatía por los calvinistas faltos de caridad /generosidad.
En un sermón sobre Romanos 9:16 -¡Romanos 9!- él dijo:
“Hay muchos que no pueden ver estas verdades, las doctrinas de la Soberanía de Dios.” ...
Él está reconociendo que hay muchos que no pueden verlas en la forma en que él lo hace, y de la foma en que lo hacían muchos en su iglesia.
“... quienes están, sin embargo, en un estado de verdaderaderamente complacer a Dios.  ¡Sí, muchos!, a cuyos pies, el mejor de nosotros estaría contento de encontrarse en el cielo."

Y tiene razón.  Hay muchos con los que estarán contentos de sólo estar junto a ellos en el cielo. 
Él (Simeon) dice: “...  Es muy nocivo/Es un gran mal cuando estas doctrinas son un motivo de separación entre unos y otros."

Y, básicamente, estoy llegando justo al meollo de esto.  Ustedes pueden darse cuenta cuando la teología se está haciendo un ídolo.  ¿Qué es un ídolo?
Un ídolo es algo por lo que sientes más cariño que por Cristo.
Un ídolo es algo a lo que le das más atención que a Cristo.
Un ídolo es algo que te ha llegado a consumir más que Cristo, más que los mandatos de Cristo, más que la obediencia a Cristo.

Y una de las cosas principales que tienen que hacer es amarse los unos a los otros.  Y, ¡familia /amigos!, si su doctrina los hace por sobre todo la persona más mezquina con quien llevarse bien, si los hace difíciles, si los hace insoportables, si los hace descorteses, si los hace poco afectuosos... entonces, ¿saben qué?, están haciendo cosas equivocadas.  Están haciendo un ídolo de eso.  

Y digo la misma cosa acerca de traducciones de la Biblia, acerca de denominaciones.  
Si tu denominación, o ser bautista, o tu aferramiento a una cierta traducción de la Biblia te hace desagradable hacia otras personas, te hace implacable hacia otras personas, has hecho un ídolo de eso.

Les contaré que Carlos Simeon -este tipo del que podemos aprender-  llegó  ... "Aquí está /Soy Carlos Simeon..."  calvinista, que se enfrenta cara a cara con Juan Wesley, arminiano... ¿Puedo leérselos?  


Aquí tienen a Simeon:
“... Señor, entiendo que a usted lo llaman arminiano.  Y a mí me llaman calvinista, algunas veces.  Por lo tanto, supongo que vamos a sacar las dagas.  Pero, antes de que yo acceda a /consienta en empezar el combate, con su permiso le haré unas pocas preguntas.
Por favor, señor, ¿encuentra/siente usted que es una criatura depravada, tan depravada que nunca habría pensado en volverse hacia Dios, si Dios no lo hubiera puesto primero en su corazón?”
Wesley le respondió:  “Sí señor, efectivamente.”
(Simeon): ¿Y perdió usted completamente la esperanza de recomendarse ante Dios por ninguna cosa que usted pueda hacer, y busca la salvación exclusivamente, y a través de la Sangre y la Justicia de Cristo?
(Wesley): “Sí -respondió él- exclusivamente a través de Cristo.”

“Pero, señor -dijo Simeon- suponiendo que usted fue salvado primero por Cristo, ¿de alguna forma u otra, no tiene después que salvarse por sus propias obras?”
(Wesley): “No.  Debo ser salvado por Cristo de principio a fin.”
Simeon dice: “Admitiendo entonces que usted primero fue cambiado de dirección por la Gracia Dios, ¿no tiene usted, de una u otra manera que mantenerse por su propio poder /sus propias fuerzas?”
(Wesley): “No.”
(Simeon): ¿Entonces qué?  ¿Tiene usted que ser sostenido cada hora y cada momento del día por Dios de la misma forma que un bebé /niño pequeño en los brazos de su madre?
(Wesley): “Sí. Totalmente.”
(Simeon): “¿Y toda su esperanza está en la Gracia y Misericordia de Dios para preservarlo hasta Su Reino Celestial?”
(Wesley): “Sí.  No tengo esperanza sino en Él.”
(Simeon): “Entonces, señor, con su licencia, enfundaría mi daga otra vez, porque este es todo mi calvinismo.  Esta es mi elección, mi justificación por fe, mi perseverancia hasta el fin.  Es, en esencia, todo lo que sostengo y de la forma que lo sostengo.  Y, por consiguiente, ¿qué le parece si, en vez de intentar descubrir términos y frases que sean un motivo de contención entre nosotros, nos unimos cordialmente en esas cosas en las que estamos de acuerdo?"

Y que Dios nos ayude.  Porque cuando eso no es lo que es real, has hecho tu teología, has transformado tu posición doctrinal en un ídolo.  

Las doctrinas de la Gracia deberían humillarnos, no infatuarnos/inflarnos.  
Y si te está haciendo infatuarte/inflarte, la has transformado en algo que Dios nunca quiso que fuera. La Soberanía de Dios nos tiene que hacer la gente más humilde sobre la faz de la tierra, si es que realmente entendemos estas cosas correctamente.
¡Dios nos ayude a ser como Carlos Simeon!

Padre, te rogamos que trabajes eso en nosotros... lo pedimos por causa de Cristo.  Obra en nosotros tal actitud, tal corazón, una benevolencia tan grande como la que tenía nuestro hermano Carlos Simeon y también nuestro hermano Juan Wesley.  Te agradecemos por la verdad de Tu Palabra, por las doctrinas que nos has revelado.  Te damos gracias en el nombre de Cristo.  Amén.  

domingo, 24 de abril de 2011

Esclavos para Cristo - Autor: John MacArthur


http://www.youtube.com/watch?v=nx3ColYGNMM

Título en inglés: "Slaves for Christ - John MacArthur" (16:13 min; puesto por illbehonest)

... lo que constituye esclavitud: "Fuiste comprado por un precio."  
No hay una expresión más definida, en términos de lo que significa ser un esclavo. Significa "ser propiedad/posesión" (de otro).  Significa "ser propiedad/posesión" (de otro).
¿Te acuerdas de estas palabras? Mateo 25:21:
"Bien hecho, buen y fiel… (siervo, dice el texto)".  Eso es lo que has leído toda tu vida. Esa no es la palabra para siervo. Esa no es ninguna de las seis palabras para siervo.
Ésa es DOULOS. “Bien hecho, esclavo bueno y fiel.”

Cuando le entregas a alguien el Evangelio, le estás diciendo:
Me gustaría invitarte a que te hagas un esclavo de Jesucristo.
Me gustaría invitarte a abandonar tu independencia... dejar tu libertad... someterte a una voluntad ajena... renunciar a todos tus derechos... ser 'propiedad de' y controlado por el Señor.
Eso es realmente el evangelio. Estamos invitando a personas a hacerse esclavas.  No escucho mucho de ese lenguaje acerca de esclavos hoy día, ¿ustedes sí?
Un tipo de servicio que no es una cuestión de opción para aquel que lo presta.
Una clase de servicio que él tiene que realizar gústele o no.
Describe a alguien sometido totalmente a una voluntad ajena -la voluntad del propietario- y en total y completa dependencia de aquel dueño.
Eso es lo que la palabra significa. Es la palabra para "esclavo".
Si crees que es una palabra dura para tragárnosla, imagina cuán duro era para aquellos que vivían en medio de la esclavitud tragarse eso.
¿Cómo pueden Jesús y los apóstoles del Nuevo Testamento hablar a gente viviendo en medio de una sociedad dominada por la esclavitud -diez a doce millones de esclavos- precisamente en esa época, acerca del hecho de que ser cristiano era ser un esclavo para Jesucristo?
No es que no existiera ni la más remota idea de lo que eso significaba. Ellos sabrían exactamente lo que eso significaba.  ¡Exactamente lo que significaba!

Déjenme contarles acerca de los esclavos en el mundo grecorromano.
Ellos no tenían libertad. No tenían derechos. No eran propietarios de ninguna cosa. No tenían recurso legal alguno ante las cortes. No podían dar testimonio como testigos en un caso legal. No tenían ciudadanía. No tenían posibilidad de hacer lo que querían hacer.
No se les  preguntaba: “Dígame, Sr. Esclavo, ¿qué le gustaría hacer para sentirse pleno?”.
No se les preguntaba: “¿Cuál cree que es su propósito?" ¿Puede soñar su sueño para que yo, su amo, pueda cumplírselo?”
ESTRAMBÓTICO /EXTRAÑO.
Ellos no tenían opción acerca de nada. No poseían nada. No podían ser ciudadanos y no podían ser parte del ejército, de los militares.
Ellos eran totalmente dependientes de quienquiera que fuera su dueño.
No significa que no había algunos beneficios. Eran provistos, cuidados, protegidos. En muchos casos eran tratados amablemente, compasivamente, amados... dentro de las familias.
Así que la idea de aparecer en ese mundo y anunciar a la gente que debe hacerse un esclavo de Jesucristo era sólo otra forma de presentar el mensaje para hacerlo imposible de creer.  Nadie se iba a poner en fila para convertirse en esclavo de ningún otro.
Ustedes son llamados a ser esclavos.
La diferencia entre un esclavo y un siervo es obvia, obvia.  Los siervos eran contratados para trabajar por salarios.  Los siervos eran contratados para trabajar por salarios... y podían renunciar.
Se les pagaba un salario por un trabajo.
Los esclavos eran posesiones, y no podían renunciar. Si escapaban eran encontrados, arrestados, azotados. Y hay toda clase de escritos antiguos acerca de los azotes a esclavos y cosas peores.  Y a veces, a veces -muchas veces- eran crucificados públicamente como una demostración al resto de los esclavos de lo que podría pasarles si se escaparan.
Volviendo a Gálatas capítulo 1, en el versículo 10 Pablo lo dice de nuevo al final del versículo. Dice: “Si yo todavía estuviera tratando de agradar a los hombres, no sería esclavo de Cristo.”
Él entendió lo que significaba la esclavitud. Sólo hago lo que agrada a mi Amo.
Este es el enfoque singular/único de ser un esclavo. No tienes que complacer a muchas personas. Solamente complaces a uno.
Esa metáfora es crucial para entender nuestra relación con el Señor. Si vamos a hablar acerca de una relación personal con Cristo y con Dios, entonces nuestra relación personal es que somos esclavos.
Esa es la mejor forma para definir esa relación.  Y Pablo acá nos dice que significa que solamente lo complacemos a Él.  Les dice a los corintios:  Tengo como ambición estar agradándolo a Él.

Se resume a esto: hacer lo que Él dice, y hacer lo que le satisface a Él. Es así de simple.
Eso es lo que un esclavo hacía.
Realmente sólo dos posibilidades: donde había una orden directa, se obedecía.   Donde no había una orden directa, se hallaba una forma de hacer lo que se sabía que le complacería al amo.  Se le obedecía y se le complacía.

Él dice estas palabras familiares: “Ahora escuchen esto, ustedes que dicen: "Hoy o mañana iremos a tal o cual ciudad y pasaremos allá un año, haremos negocio y tendremos ganancia. Sin embargo, ustedes no saben cómo será su vida mañana. Sólo son un vapor que aparece por un poco de tiempo y luego se desvanece. Más bien, debieran decir: Si el Señor quiere, viviremos y haremos esto o aquello.” (Santiago 4:13-16)
Eso es hablar como un esclavo. Eso es lo que significa estar sometido a una voluntad ajena. Hubo esclavos en el pasado, habrá esclavos en el futuro, esclavos en el cielo.  Somos Sus esclavos ahora, quienes estamos siendo enseñados por el libro de Apocalipsis de que estas cosas pasarán.  Nunca dejaremos de ser esclavos.  Nunca.
Un siervo podía ser contratado y renunciar.
Un esclavo era una posesión.
Eso significa propiedad exclusiva, porque era comprado por un precio. ¿Suena eso a algo dicho en el Nuevo Testamento?

Dos, disponibilidad completa y constante, y obediencia. Disponibilidad completa y constante, y obediencia.

Tres, sometido a una voluntad ajena.
Ningún hombre puede ser esclavo de dos amos, ¿correcto?  IMPOSIBLE.
Podrías tener dos empleadores. Podrías tener un trabajo de día y un trabajo de noche.  Pero no puedes tener dos amos que tengan control total sobre ti, porque ambos serían tus dueños.  Y todos sabían eso.
Es por eso que esa declaración es evidente en sí misma:
"Ningún hombre puede ser esclavo de dos amos."
Entonces:
- Propiedad exclusiva de un amo.
- Disponibilidad completa y constante, y obediencia a aquel único amo.
- Y, simple/sencilla, en el sentido de que es única.  Vamos a llamarle devoción única a Aquel Único Amo.
Es de lo que habla el Nuevo Testamento también, ¿no es así? "Ama al Señor tu Dios", ¿con qué? "TODO tu corazón, alma, mente, y fuerza."  "No tengas otros dioses."  "Haz todo lo que haces para agradarlo a Él."  "Honra a Cristo."

Cuarto, un esclavo tenía dependencia total de su amo para todo. Para todo. Absolutamente todo.

Y quinto, toda disciplina y recompensa venía de aquel único Amo. Eso es lo que era ser un esclavo.
Eran posesión de una persona.
Estaban completa y constantemente disponibles y obedientes a aquel único amo.
Tenían una ‘razón de ser’ consumidora, una razón para vivir.  Y esa era agradar a ese amo. Eran dependientes de aquel amo para absolutamente todo.
Y toda disciplina y recompensa era a discreción de aquel amo.

Todo eso está directamente conectado a lo que significa ser un "esclavo de Jesucristo":
- Somos posesión Suya, porque fuimos comprados por un precio.
- Estamos en una posición de completa y constante disponibilidad y obediencia a Aquel Único Amo, al grado que podamos decir: “No se haga mi voluntad sino la Tuya.”  Todo el tiempo.
- Somos únicos en nuestra devoción y eso significa que no tenemos ningún otro amo para obedecer. Y ningún otro amo a quien servir. Y por eso el Nuevo Testamento dice: “No puedes” -estas son las palabras de Jesús- “...servir a Dios y al dinero.”  No puedes servir a Dios y a algo más.  

No puedo decirte por cuantos años he tenido debates con personas sobre el Señorío de Cristo. Déjame decirte algo realmente simple:
KURIOS y DOULOS son dos palabras que describen ambos lados de una relación.
Si hay un esclavo -déjame decirte algo- hay un Señor.
Si hay un esclavo, hay un amo.
Si hay un amo, hay un esclavo.
No te llames amo si no tienes un esclavo.
Y no eres esclavo si no tienes un amo.

Por eso es que el Nuevo Testamento ni siquiera se molesta en defender la idea -como si existiera- de si cuando vienes a Cristo, Él es o no tu Señor.   Eso es patentemente obvio. Cuando confiesas a Jesús como Señor, estás al mismo tiempo confesándote a ti mismo como esclavo.
No hay otra forma de verlo.
KURIOS y DOULOS son los dos lados de la relación.
Un esclavo es alguien cuya vida pertenece totalmente a otro: propiedad absoluta, control absoluto, sometimiento absoluto, obediencia absoluta, lealtad absoluta, dependencia absoluta.
Ahora, si no agarras esa idea de esclavitud, y muchos de nosotros la perdemos porque ha estado oculta en el texto en castellano (y en el texto en inglés también).
Es difícil para nosotros entender realmente la esencia de lo que realmente significa ser un cristiano.  Eres un esclavo de Jesucristo.  Eres una posesión Suya.  Has sido comprado por Su sangre, Hechos 20.  Has sido comprado no con plata ni oro, ¿sino con qué? 1 Pedro 1:18-19, "la preciosa sangre de Jesucristo".  Has sido comprado, Apocalipsis 5:9.  
No tienes derechos independientes.  
Los esclavos no tienen derechos. Los esclavos no poseen nada.
Ellos no podían poseer sus propias propiedades. Ante la ley no eran ciudadanos.  No podían ocupar un puesto público.
Estaban completamente bajo el arbitrio y la provisión y la protección y el cuidado, y el abuso -en un sentido terrenal- de sus dueños.
Había una gran ventaja en ser un esclavo de un amo benevolente, generoso, misericordioso, amable y compasivo.  ¡No puedo pensar en una vida mejor!
“Si alguno quiere venir en pos de mí, niéguese a sí mismo”. Esas son palabras para un esclavo.  Ésa es la forma de hablarle un esclavo.  
“Toma tu cruz y sígueme”.  Es tu fin… el fin de tu vida, estás acabado. Se terminó, se acabó. Ahora eres el esclavo de Jesucristo.

Y no es gravoso /agobiante. Jesús dijo: “Toma mi yugo porque mi yugo es…” ¿Qué? Fácil.Y mi carga es liviana y encontrarás reposo.
Vas a ser esclavo de alguien.
Ser un esclavo de Jesucristo está más allá de cualquiera otra forma de esclavitud que alguien siquiera conoció.  Porque este Amo, escucha esto:
Nos hace hijos.  Y nos da todos los derechos de Sus propios hijos.
Él nos adopta en Su familia.  Nos llama "coherederos con Cristo".
Nos lleva al cielo, donde gobernamos y reinamos desde Su propio trono.  Y derrama todas las espléndidas riquezas de Su posesión eternamente y para siempre jamás, para nuestra absoluta alegría y Su propia gloria.

¿Quién no querría ser un esclavo bajo a ese Amo?
¡Qué gozo es ser un esclavo de Cristo!


sábado, 23 de abril de 2011

Todo es acerca de Cristo.

http://www.youtube.com/watch?v=t5caksOsm88

Título en inglés: "It's all about Christ" (4:36 min; puesto por katiekatew)

No estoy aquí esta noche para hablar acerca de los hombres... o para hablar acerca de la Iglesia o de religión.
Porque todas esas cosas tienen sus errores y sus fallas.
Todos ustedes pueden levantarse y hacer acusaciones contra estas cosas.
Los hombres son débiles y pecadores.
La religión es, algunas veces, débil y defectuosa.

Pero Cristo... No hay nadie como Cristo. 
Él es el Rey de reyes y el Señor de los Señores. 
Él es el Hijo de Dios.  
Él es perfección  infinita.
Él es fuerte.  Él es poderoso.
Él nunca ha fallado.  Y ha cumplido cada promesa que alguna vez hizo.
Ustedes no tienen argumentos contra Él... porque no hay nadie como Él. 
Él, y sólo Él es el Salvador del mundo... y el Cristo de Dios.
De modo que todo es acerca de Cristo.

¿Qué piensas de Él?  Porque esa es toda la base del juicio de Dios sobre los hombres.
Aunque es verdad que un día te pararás delante de Dios y vas a ser juzgado con respecto a tu pecado, debes entender que la pregunta más grande en el aquel día será esta: 
“¿Qué piensas tú de Jesucristo?” 

¿Qué has hecho tú con Cristo?  Jesucristo te creó y debido a eso Él tiene el derecho sobre ti. Él es tu hacedor y en virtud de eso Él también es tu poseedor, tu dueño.
Y Él no solamente es dueño, sino que también es SEÑOR. 

Dices: “¡No veo eso! ¿Dónde está Su Trono?”
Sabe esto: 
Que Dios ha señalado un día en el cual juzgará a todos los hombres a través de Aquél que fue crucificado por hombres perversos... Jesucristo. Su trono está viniendo. Su juicio está cerca.  ¡Y en el día en que Él juzgue todos reconocerán Su derecho de juzgar porque Él estará juzgando lo que Él mismo creó!  

Hay algo que debes entender acerca de Dios Padre:  SU HIJO ES TODO PARA ÉL. 
Todo lo que el Padre ha hecho alguna vez lo ha hecho para Su Hijo. 
Él creó el mundo en Su hijo. 
Él se revela a Sí mismo al mundo a través de Su Hijo. 
Él redime al mundo a través de Su Hijo.  
Y Él juzga al mundo a través de Su Hijo. 
Cristo es el primero en cada pensamiento de Dios.
Y Cristo es lo más importante/ lo primero en los pensamientos de cualquier ser que encuentre su morada en el cielo.
Cuando Jesucristo vuelva, Él estirará Su mano sobre el mundo... y dirá: '¡Mío, Mío, Mío, Mío, Mío! Fue hecho por Mí y fue hecho para Mí.'  
Y sentado en Su trono, el propio Dios se asegurará de que toda rodilla se doble y toda lengua confiese que JESUCRISTO ES SEÑOR.  
Y en aquel día sabrás lo que verdaderamente es real.  Y la Palabra de Dios será vindicada.   
¡Y algunos de ustedes se pondrán felices por eso!  Pero, otros se darán cuenta que vivieron por motivos equivocados y perdieron todas las cosas.

"Por tanto, habiendo pasado por alto los tiempos de ignorancia, Dios declara ahora a todos los hombres, en todas partes, que se arrepientan, porque Él ha establecido un día en el cual juzgará al mundo en justicia, por medio de un Hombre a quien ha designado, habiendo presentado pruebas a todos los hombres al resucitarle de entre los muertos." (Hechos 17:30-31)

jueves, 21 de abril de 2011

No me avergüenzo del VERDADERO Evangelio

http://www.youtube.com/watch?v=vwpm1G5pVho


Título en inglés:  "I Am Not Ashamed of the TRUE Gospel" (10:53 min, puesto por LaneCh).

Ángeles farfullan (hablan rápida y atropelladamente) Señor, cuando intentan describir lo que ha hecho Tu Hijo.  ¡Ah, las profundidades de la Sabiduría de Dios! Que Él convocara a hombres  falibles, con un lenguaje escaso/pobre, para hablar cosas que las lenguas de los ángeles no pueden declarar. ¡Ah Dios!, a causa de esto, ayúdame este día. En el nombre de Jesús.  Amén.

Porque no me avergüenzo del evangelio”.  La carne de Pablo tenía razones de sobra para avergonzarse del Evangelio, porque él predicaba el verdadero. Vivimos en un tiempo donde pensamos que, para ser relevantes a nuestra cultura, debemos ser como nuestra cultura. Vivimos en un tiempo donde pensamos que, para que el evangelio sea relevante, debemos -de alguna forma- adaptarlo a la cultura, ¡y nada en la faz de la tierra o en las entrañas del infierno puede estar más lejos de la verdad! Somos relevantes no porque somos como nuestra cultura. Somos relevantes porque somos absolutamente diferentes. Y nuestro evangelio tiene poder no porque es aceptable a hombres carnales. Nuestro evangelio tiene poder porque es un ESCÁNDALO para los hombres.
Pablo no está avergonzado de este Evangelio; sin embargo, su carne tenía razones de sobra para estarlo.
Imaginen por un momento.  No estamos hablando de un hombre que entra en el contexto del *Cinturón Bíblico.  Estamos hablando de un hombre que entra en el contexto de la mitología judía... de la filosofía griega.  
Cada concepto de la filosofía griega, cada concepto que los judíos tenían acerca del Mesías contradecían al Evangelio de Jesucristo. Cada vez que Pablo el apóstol se paraba, parecía ser nada más que un loco de atar ante los hombres carnales.

Y cada predicador que alguna vez fue eficiente y capaz -desde ese día- ha tenido el mismo rótulo sobre sí.
G. Campbell Morgan, cuando se subía a la torre de Westminster a predicar, siempre decía que citaría el versículo: Como cordero que es llevado al matadero, y como oveja ante sus trasquiladores" (Isaías 53:7)  ¿Por qué? ¡Él sabía que, a menos que Dios  se moviera a su favor con este Evangelio del querido Hijo de Dios, no pasaría absolutamente nada!
Pero no vemos poder como ése, hoy. ¿Por qué? Porque apoyamos un evangelio con las estratagemas carnales de los hombres. Removemos el escándalo, ¡en el nombre del amor! Como si tuviéramos una sabiduría más grande que la de Dios para retorcer Su evangelio aquí y allá, para que pueda ser más apetecible /agradable a los hombres.
El evangelio de Jesucristo.  
La carne tiene todas las razones para avergonzarse de él. Pero en eso radica el poder. Todo acerca del Mesías de Dios contradecía todo lo que esos hombres creían acerca del Mesías. Todo acerca de la salvación de Dios contradice absolutamente todo lo que los hombres creen sobre cómo la salvación debería ser ganada y qué forma debería tomar. Y, a menos que nos demos cuenta de eso, no tendremos evangelio aquí en esta iglesia. No tendremos poder y no veremos conversión verdadera. Debemos estar deseando unirnos a nuestro Maestro en ser un escándalo. Que prediquemos a Cristo crucificado de tal manera, que sea para exaltar al Dios todopoderoso y para humillar a los hombres. Tanto, que al aprender a despreciarse a sí mismos, ellos estimen el Evangelio y sean salvos.
La peor cosa que alguna vez le pudo pasar a un predicador -y la peor cosa que alguna vez le pudo pasar a una iglesia- es transformarse en civilizada y respetable. Porque en eso no hay poder. 
Somos peregrinos. Somos extranjeros. Somos torpes. Somos desplazados. No encontramos hogar acá, ¡ningún lugar dónde encajemos debidamente, porque tenemos una ciudad cuyo Constructor y Hacedor es Dios! 
Y nuestro trabajo es tomar un evangelio tan encubierto por los diseños de los hombres que ya no tiene poder alguno.  Es nuestro trabajo remover toda esa vestidura defectuosa y predicar los elementos básicos de un evangelio que no es nada más que un escándalo. Pero en ESO, veremos el PODER de Dios.

Ahora, miren el evangelio que tenemos hoy.  Sólo déjenme poner este evangelio ante ustedes:  El evangelio de "las 4 leyes"; el evangelio de "las 5 cosas que Dios quiere que sepas"; el evangelio de “Cómo llegas al cielo.” 
Es algo como esto:
¿Sabes que eres pecador?
Y si la persona dice: “Sí”
Entonces el próximo paso: "¿Te gustaría irte al cielo?"
Si dicen “Sí”, el próximo paso.
"Bueno, entonces, repite esta oración."
Y si ellos repiten esa oración, entonces el próximo paso:
"Bien, ¿te salvó Dios?"
Y generalmente la respuesta es algo así: "No sé."
Entonces el testigo por Cristo dice: "Bueno, ¡claro que te salvó! ¡Si no te salvó, Él era un mentiroso, porque Él dijo que si abrías la puerta y lo invitabas Él entraría, y Él no miente!"

Y exactamente aquí está la razón por la cual la gran mayoría de las organizaciones evangélicas hoy están llenas con personas perdidas.  Ahí mismo.
Ahora, vamos a ese escenario por un momento.
"¿Sabes que eres pecador?"
Y algunas veces decimos -ustedes saben- no queremos ser demasiado serios acerca de todo esto.
"Tú sabes que todos son pecadores, ¿verdad/no es así ?

Mi madre fue diagnosticada con cáncer. Mi suegra recientemente ha sido diagnosticada con cáncer. ¿Que pensarías de un doctor que caminara hacia ambas y dijera: "¡Bueno, ustedes saben que tienen cáncer!, ¿no es así/verdad?"  
La forma en que hablamos sobre el pecado traiciona nuestra ignorancia de la absoluta devastación del asunto. 
Les hablamos a los hombres sobre el pecado, ¿qué hay de malo en ser solemne?
Vivimos en una era tan banal y todos marchamos en una feria de vanidades, donde todos quieren vestir colores brillantes e ignorar el hecho de que cada quien marcha hacia un despeñadero rumbo a una destrucción eterna. Las sociedades como las conocemos -el occidente- se están despedazando ante nosotros, y aún así elegimos ser banales, frívolos y "felices".
La verdad es que el hombre está contrahecho y arruinado/acabado, y muerto. El hecho es que un juicio está viniendo. El hecho es que todo lo que podemos ver será derretido como con fuego.
Y entonces miramos a los hombres y decimos:
"¡Sabes que eres  pecador!, ¿verdad?".
Y, comúnmente, hasta diríamos esto, porque se nos ha enseñado así en el Seminario. Decimos: "Bueno, tú sabes que TODOS somos pecadores".  No queremos sólo decir "tú", porque no queremos que te sientas aislado y culpable tú solo. Yo sí quiero que te sientas culpable y aislado tú solo. Porque sólo así llegarás a ver tu necesidad de Cristo.

"¿Sabes que eres pecador, verdad?" Y si ellos  dicen "Sí", seguimos. Ahora, volvamos atrás. 
Si alguien dice "sí" a la pregunta "¿sabes que eres pecador?", ¡no significa absolutamente nada!
¡Anda a preguntarle al diablo!: "¿Sabes que eres un pecador, ¿no es verdad?".

Él dirá: “Sí, de hecho lo sé y ocurre que soy justamente el mejor.” 
La pregunta NO es: "¿Reconoces que eres pecador?".  
La pregunta es ésta: "Ya que me has escuchado predicando el evangelio: ¿Dios ha hecho una obra tal en tu corazón que el pecado que antes amabas ahora detestas?  ¿Y la justicia que antes odiabas e ignorabas, ahora deseas? ¡Esa es la pregunta! 
Todos saben que son pecadores. Es sólo que no se dan cuenta de cuán atroz y terrible es eso. Tampoco quieren dejar aquello que eligieron beber hasta acabar /aceptar sin cuestionar, como si fuera agua.
Así que, como ven, la pregunta no es: ¿Reconoces que eres pecador?. 
La pregunta es: "Señor, como le he estado hablando -o quizás es un discipulado de larga duración durante un lapso de tiempo- "Señor, como he estado compartiendo con Ud. y discipulándolo, ¿qué ha hecho Dios en su corazón?"
¡Las personas vienen a mí todo el tiempo y dicen: “Tengo una nueva relación con Dios”! 
Y digo: ¿Tienes una nueva relación con el pecado? Porque si no tienes una nueva relación con el pecado, no tienes una nueva relación con Dios.

Entonces, en realidad no es: "¿Sabes que eres pecador?". 
Es: "Señor, usted es un pecador. Ahora, déjeme ir a la Escritura y explicarle lo terrible que es esa afirmación. Y en el aterrador aprieto que está usted ante un Dios amoroso."
Pensaste que iba a decir "Dios justo". Bueno, no es sólo Su Justicia y Su Santidad las que provocan Su Ira.  También es Su Amor.

*Tomado de Wikipedia en español: Cinturón bíblico o Cinturón de la Biblia (en inglés, Bible Belt) es un término coloquial utilizado para referirse a una extensa región de los Estados Unidos donde el cristianismo evangélico tiene un profundo arraigo social,